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Cómo duplicar tu productividad personal despertando 4:30 a. m. sin morir en el intento

By diciembre 19, 2015febrero 1st, 2019Productividad

Imagina despertar increíblemente temprano y amar cada segundo de la mañana

¿Prefieres no leer tanto? Escucha esta publicación en audio en el episodio #4 de mi podcast Mentes Curiosas en Spotify

¿Te hacen falta horas en el día?

El 9 de septiembre del 2014 comencé el reto #21earlydays propuesto por Filipe Castro Matos. La dinámica consiste en despertar todos los días de la semana (menos sábados y domingos) a las 4:30 a. m. y dormir 10 p. m. de forma estricta.

Sabía que implementar esta “locura” sería excelente para mí pues a lo largo de mi vida he descubierto que trabajo mucho mejor en las mañanas que en altas horas de la madrugada y seamos sinceros ¿quién no ha dicho alguna vez que le hacen falta un par de horas a su día?. Leí sobre este reto en el momento perfecto pues últimamente había estado despertando una hora antes de salir a la oficina e incluso media hora antes, matando mi productividad en las mañanas y dejándome menos contento de lo normal.

Preparando El Terreno

Antes de comenzar hice los preparativos necesarios para no fallar, compré café instantáneo (producto con el cuál tengo una relación extraña y que jamás conservo en casa, pues, aunque me guste en todos los sentidos: sabor, textura y efecto, prefiero no consumirlo de forma constante) para ayudarme un poco, teniendo en mente que al terminar la segunda semana del reto dejaría de consumirlo.

El segundo y más importante preparativo fue reconocer que estaba destinado a fracasar si no especificaba y escribía claramente cómo iba a utilizar cada minuto de mis nuevas “súper mañanas”, no importa que tan fuerte fuera mi voluntad.

Recientemente me hice parte de un grupo mastermind llamado 6×6 Awesomeness donde, como su nombre lo indica, formamos grupos de 6 personas que durante 6 semanas fijamos metas personales medibles (de un área de la vida en común) que deseemos lograr en este lapso de tiempo, y cada semana tenemos una conferencia en Skype para compartir nuestros caminos, evaluar nuestro progreso y, sobre todo, apoyarnos. El grupo del que formé parte las primeras 6 semanas tenía como área de trabajo las relaciones con seres cercanos y con nosotros mismos; dentro de una de las sesiones, una miembro del grupo compartió su rutina personal de cada mañana (tomada, me parece, del trabajo de Hal Elrod) acuñada con el acrónimo SAVERS el cuál decidí adoptar como base para mis 21 días.

SAVERS es una estructura compuesta por lo siguiente: Silence (meditación en silencio), Affirmations (escribir una afirmación diez veces), Visualization (ejercicios de visualización), Exercise (ejercicio físico), Read (lectura atractiva) y Scribe (escribir unas palabras).

Silence

Inmediatamente después de tener mi taza de café lista, me siento a disfrutar de ella durante 5 minutos; realmente concentrándome en el sabor de este y expresando gratitud por la calma y silencio absoluto que estoy experimentando.

¿Cuándo fue la última vez que realmente te sentaste a disfrutar una bebida? Me refiero a tomarla sin estar haciendo algo más como leer, comer, platicar, ver tele o pensar en cosas del pasado o pendientes del futuro. De verdad es una sensación agradable.

Affirmations

Con libreta y pluma en mano me siento a escribir una afirmación diez veces. Los primeros 15 días utilicé algunas de aprendí en un curso de Eben Pagan -uno de los internet marketers más reconocidos en el mundo- y más tarde experimenté con algunas “aformaciones” (afirmaciones formuladas como preguntas) por ejemplo:

“¿Por qué amo despertar 4:30 a. m.?” en lugar de “Amo despertar 4:30 a. m.”.

Cuando nos afirmamos metas o cosas muy exageradas a las que queremos llegar (y racionalmente o inconscientemente no creemos que las podemos alcanzar) a veces es difícil repetirlas sin experimentar ese sentimiento de que nos estamos engañando a nosotros mismos, en cambio si las formulamos como preguntas, nuestro mismo inconsciente comenzará a indagar las respuestas por nosotros, llevándonos en el futuro a prestar atención cuando veamos la respuesta para que podamos aprovecharla.

Visualization

Para mis ejercicios de visualización decidí hacer una de mis meditaciones favoritas llamada The Six Phase Meditation (también conocida como The Envisioning Method) de Vishen Lakhiani, fundador de Mindvalley, una de las compañías que más admiro en el mundo. Esta meditación me ha gustado mucho por tener una estructura fácil de seguir en la que cada una de las seis secciones que la conforma tiene una razón -respaldada científicamente- de ser.

I don’t do shit ‘till I meditate” – Russell Simmons, magnate del hip-hop

Mindvalley tiene varios recursos gratuitos (como video, audio, infografías y la aplicación móvil Omvana) que hablan a fondo del método y te permiten practicarlo, la estructura es la siguiente:

1. Conciencia – Compasión
2. Gratitud
3. Perdón
4. Visualización Del Futuro a 3 años
5. Intenciones del día de hoy
6. Consentimiento

Se le dedican aproximadamente 3 minutos a cada una de estas seis fases.

Meditar no es sólo para hippies o practicantes de religiones orientales, está comprobado que incrementa la densdidad de materia gris en diversas partes del cerebro y tiene beneficios impresionantes para nuestro ser, cada vez más y más empresas grandes desde Silicon Valley (ej. Google) hasta Wall Street (ej. Goldman Sachs) están adoptando este invaluable hábito.

(NOTA: ¿Quieres aprender a fijarte las metas correctas y dejar de perseguir objetivos sin sentido? Descarga el ejercicio de «Las 3 preguntas más importantes» para cambiar la forma en la que planeas tu vida. Obténlo aquí)3

Exercise

Me he ejercitado de forma continua los últimos 12 años, menos los últimos 3″ – Johnny Drama de Entourage.

Desde mis últimos años de preparatoria y casi toda mi época en la universidad me ejercité constantemente, aunque en algún punto lo abandoné incluso por completo, tras varios intentos de retomarlo siempre algún proyecto fuertísimo en mis empresas me hace dejarlo a menos de 2 meses de haber comenzado.

Estas horas ganadas en la mañana han sido la diferencia en mi vida en cuánto a éste tema: me ha permitido retomar exitosamente mis rutinas de ejercicio, lo cual me fascina y he logrado mejorar mucho mi físico. Otro punto muy valioso es saber que el ejercicio diario aumenta el poder de nuestro cerebro (según un libro que llegó a mí hace unos años: Brain Rules de John Medina) lo cual todos debemos considerar importante.

Para maximizar mi rutina, entre serie y serie en el gimnasio, utilizo una aplicación que recientemente me recomendaron y me ha parecido increíble: Elevate. ¿Qué hace? Cada día te da ejercicios mentales para fortalecer diversas áreas que tu designes, los cuales se presentan como mini-juegos los cuales son bastante divertidos. Es interesante lo que he logrado con estaapp, un ejemplo es, que incluso pasando por la facultad de ingeniería hace años, jamás me he considerado sobresaliente en matemáticas; desde que uso Elevate constantemente he descubierto que más bien todos estos años me ha dado flojera una pequeña parte de esta área del conocimiento y no todas las matemáticas en si como yo creía. En realidad no es porque no me gustaban ni porque no soy bueno en ellas, descubrí que me da flojera ejecutar operaciones aritméticas básicas de forma mental (probable trauma infantil de las dinámicas de Kopfrechnen del Colegio Alemán) y desde que uso Elevate me he comenzado a emocionar cada que tengo que calcular una cuenta, descuento, rendimiento y otras cosas de mi vida diaria; ahora intento hacerlo en la mente antes de sacar una calculadora y he notado cómo mi precisión va mejorando día tras día.

Al regresar a casa del gimnasio (al que aprovecho ir trotando y escuchando el brillante podcast de James Altucher “Ask Altucher”) tomo una buena malteada de proteína reducida en carbohidratos y estoy cubierto en temas alimenticios hasta las 9am.

Read

Amo leer y siempre he encontrado tiempo para hacerlo, pero destinar un momento específico de la mañana para esta actividad me ha ayudado a llevarla al siguiente nivel, explico: desde hace unos años conservo la costumbre leer un mínimo de dos libros de no-ficción al mes -a veces incluso cuatro o más- pero desde que comencé a leer constantemente en el mismo horario de mis “súper mañanas” he notado que retengo y aplico más lo que leí durante el día y por supuesto, al momento de aplicarlo aseguro que el conocimiento se quede conmigo más tiempo y me beneficie más a mí y a los que me rodean.

Durante estos días leí: Conversations With God de Neale Donald Walsch (probablemente el libro cuyo tema es el más alejado a lo que acosumbro leer normalmente), Work The System de Sam Carpenter y The Trusted Advisor de David Maister.

Coincidió que a la mitad del reto llegaron a mi oficina cuatro libros más que pedí a Amazon.com el mes pasado lo cual me dificultó mucho escoger con cuales empezar ya que estoy buscando fortalecer varias áreas de mi vida y de mis negocios en éste momento.

Scribe

El último paso de la estructura me ha permitido crear un hábito que llevo años intentando cultivar y jamás he logrado: escribir de forma constante.

Dediqué varias mañanas a contestar preguntas en temas de marketing digital en Quora, escribir artículos de blog, pensamientos e incluso avanzar un poco con el libro que voy a publicar en los siguientes meses.

Cada día he visto que poco a poco mejora mi habilidad de plasmar mis pensamientos en palabras organizadas en papel o incluso en la computadora lo cual me está haciendo bastante feliz. Escribir es una actividad que disfruto mucho y como habilidad profesional la considero extremadamente valiosa.

¡Aún después de SAVERS sigues teniendo tiempo libre!

Al terminar estas seis actividades dedicaba el tiempo que me quedaba antes de salir a la oficina para contestar correos electrónicos o pequeños pendientes. Realmente se puede utilizar de la forma que se requiera cada día.

Resultados

Somos lo que hacemos repetidamente. La excelencia, entonces, no es un acto; es un hábito” – Aristóteles

En cuanto a resultados, además de mejorar muchas de mis habilidades personales, crear hábitos positivos y aplicar mucho más los conocimientos que adquiero a diario leyendo, noté un cambio impresionante en mi estado mental hacia mi trabajo: sabiendo que ya trabajé en áreas clave de mi crecimiento personal toda la mañana, me siento increíblemente feliz y agradecido durante todo el día, lo que me motiva a dar todo mi esfuerzo y energías a mis empresas y clientes. Este cambio ha ido aumentando mi productividad en la oficina.

Otro punto interesante es que a las 7 p. m. que me libero de mis pendientes del día, puedo continuar trabajando hasta la hora de dormir (10pm) o puedo procrastinar completamente fuera de culpas, pues ya logré tanto en el día que relajarse es mucho más satisfactorio.

Tu sólo contra el mundo (o “el mundo es tu patio de juego”)

Estar despierto y activo cuando la mayoría del mundo duerme es algo atemorizante al principio, observar la inactividad de las calles te hace reflexionar si hay algo malo contigo por estar rompiendo las costumbres de sueño que haz seguido toda tu vida y que la sociedad considera estándar, definitivamente el ambiente se siente distinto, completamente en paz. Los primeros días te sientes sólo aunque al acostumbrarte el mundo se convierte en tu patio de juegos y experimentos privado, una sensación como la que jamás has experimentado.

Preguntas Frecuentes

Es interesante que los días que publiqué de mis avances o frases motivacionales en Facebook sobre este experimento, tuve mucho más respuesta de mujeres que de hombres [nota: ¿alguien sabe la razón? ¡me encantaría saberla!]. En la vida real, comentar sobre este reto a mis amigos, conocidos y clientes mostró ser un excelente tema de conversación del cual disfrute mucho hablando y compilé las preguntas más frecuentes que me hacían:

¿A qué hora te duermes?
10 p. m., 10:30 p. m. máximo. Si no puedes dormir a esta hora por viajes del trabajo, etc. puedes acomodar tus horarios, mientras duermas seis horas y media en promedio.

¿No hay evidencia científica que debemos dormir ocho horas?
He visto en fuentes confiables a médicos que afirman debemos dormir ocho horas, otros que seis y así infinidad de conclusiones cuya verdad absoluta no conozco; lo que puedo afirmar es que mi cuerpo se ha sentido mejor que nunca durmiendo seis horas treinta y que teniendo horarios estrictos de sueño (dormir/despertar) me ha permitido dormir incluso más horas que muchas personas con horarios flexibles de sueño.

¿No te da sueño en la tarde?
Es curioso que antes de comenzar esto mi cuerpo me gritaba tomar una siesta después de la comida, al acostumbrarme a #21earlydays esta necesidad desapareció. No me da sueño en la tarde y no tomo siestas. Los primeros 3 o 4 días reconozco que mi cerebro estaba muerto a las 7 p. m. y tenía la necesidad de desconectarme de todo, luego me acostumbré y se estabilizó mi rendimiento mental de 7 p. m. a 10 p. m.

¿Algún tip extra?
Definir puntualmente que harás con cada minuto de tus mañanas, si no lo haces probablemente estás destinado a fracasar pues el ocio te convencerá de volver arrastrado a tu cama para dormir las horas que “sientes que te faltan”.

¿No te da trabajo “apagar tu cerebro a las 10 p. m. ”? ¡A esa hora el mío corre a mil por hora!
Existe (y creo) en la teoría de que hay personas que son más productivas en la mañana, otras en la noche. Prueba si esto te funciona, si no adáptalo a tu estilo propio.

En lo personal sentía que cumplí tantas cosas en el día que dormir 10pm era muy sencillo, además ya estaba bastante cansado. Otra clave para esto ha sido instalar la aplicación f.lux en mi MacBook Pro, que elimina toda la luz azul de tu pantalla en la noche. La luz azul interrumpe los ciclos naturales de sueño en tu cerebro, aquí hay un artículo que lo explica a fondo.

¿No requieres cambiar tus hábitos alimenticios?
Probablemente requieras una comida más al día, en este rubro particular puedo decir que a mí me daba mucho más hambre pero lo atribuyo al ejercicio físico pesado de la mañana más que a despertar temprano. Un par de días falté al gimnasio para probar esta hipótesis y al menos en mi caso la probé acertada: el hambre excesiva era causada por el gimnasio y no por el patrón de sueño.

Conclusión

A las 4:30 a. m. nadie marca tu celular, no hay actividad en redes sociales, no tienes pendientes inmediatos, los correos electrónicos no llegan en oleadas; es un horario perfecto para cumplir tus metas: el santo grial de la productividad personal.

¿Te parece difícil? Sinceramente te digo que vale la pena intentarlo aún como reto de 21 días, ver si te funciona y si mejoraste en cualquier área de tu vida. Napoleon Hill escribió: “recuerda que no se requiere más esfuerzo para apuntar alto en la vida, para demandar abundancia y prosperidad, del que hace falta para aceptar la miseria y la pobreza”. Te invito a hacer el esfuerzo, yo por mi parte ya he adoptado este regimen a largo plazo en mi vida (#365earlydays) y espero seguirlo haciendo por años.

¡Comparte conmigo tus comentarios sobre despertar tan temprano e intercambiemos ideas!

¡Felicidades por llegar hasta aquí! Ahora si quieres escuchar mis comentarios en audio o compartir con algún amigo que no lea tanto, puede hacerlo en el episodio #4 de mi podcast Mentes Curiosas en Spotify

(NOTA: ¿Quieres aprender a fijarte las metas correctas y dejar de perseguir objetivos sin sentido? Descarga el ejercicio de «Las 3 preguntas más importantes» para cambiar la forma en la que planeas tu vida. Obténlo aquí)3

 

Hans Nolte

Empresario, inversionista, coach y conferencista – Hans Nolte es socio fundador de Zebra Digital Marketing, creador de El arte de Facebook y Metas Poderosas.